El entrenador de Temperley Jorge Vivaldo habló de todo. El rendimiento del equipo, las declaraciones post-partido, las ausencias y regresos y el rumor de su ida a Chacarita.
“Caímos en un pozo, cometimos fallas muy grandes”; “En la nota del Diario Olé hay cosas sacadas de contexto. A mi me dio vergüenza perder 4-1, pero el responsable soy yo”; “Quieren quebrar mi relación con la gente de Temperley y no lo van a lograr”; “Hay mala leche, escuché algunos que dijeron que era tiempo que me vaya a Chacarita”.
-¿Por donde se explica la merma en el rendimiento hasta llegar al 1-4?
-Fue raro realmente. Tuvimos chances para extender la ventaja estando 1-0 y después hacemos un foul evitable cerca del área y desgraciadamente Krikorian mete el gol en contra. Caímos en un pozo, cometimos fallas muy grandes, en todas las líneas. Era una final y hasta empatando manteníamos el lugar en la tabla por eso nos da mucha bronca.
-¿Le falta capacidad para resolver en el momento al equipo?
-No creo que sea así. Nosotros no planteamos los encuentros dependiendo del rival sino que tenemos una identidad. Además, no hay mucha diferencia entre ellos y nosotros. En el fútbol para que te sorprendan hay que ser muy dormido.
-¿Cuánto dolieron las ausencias?
-Mucho. Primero porque fueron varios y después por la experiencia que le podrían impregnar. La mayoría de los que faltaron son titulares. Igual nada justifica la cantidad de errores que se cometieron.
-¿Qué analizas de tus declaraciones post-partido?
-En la nota del Diario Olé por ejemplo hay cosas sacadas de contexto. A mi me dio vergüenza perder 4-1, pero el responsable soy yo. Por eso quería llegar a mi casa y meterme en un pozo porque tras ganar tres partidos uno sueña con llegar a más.
Te sacan en la Tapa de Ole diciendo que “Vivaldo se avergüenza de Temperley”. No es así, el tema es como jugamos.
Hay jugadores que cuando tienen la oportunidad no la aprovechan, por rendimiento se ponen y se sacan solos. Vende más el conflicto y yo soy muy frontal.
-¿Esto de se frontal te jugó en contra alguna vez?
-En Temperley me pasa algo especial porque el trato que tengo con los muchachos no lo voy a tener mas adelante en otros clubes. Al haberlos tenido a la gran mayoría como compañeros, podemos hablar de todo y ser frontales porque yo voy siempre con la verdad, aunque a veces duela.
Todos nos equivocamos y por eso tenemos que tratar de corregir para crecer. A la larga, los futbolistas lo valoran, porque no me gusta dejar pasar cosas por alto.
-¿Estás esperando por los lesionados para armar el equipo?
-Pagés ya está para jugar. Mas Farina y el “Tati” que quizás vaya al banco porque no está 100%. Quiñónez tiene un desgarro y no llega, más Brito y Villalba que van evolucionando aunque creo que el primero llega, el segundo no.
-¿Te llamaron de Chacarita?
-Lo juro por mis hijos que ningún dirigente de Chacarita me llamó. Aquel que me conoce en la intimidad sabe que no me hubiese expuesto a ese juego. A mi me habían tentado antes, cuando arribó Zielinzky pero ahora no. Quieren quebrar mi relación con la gente de Temperley y no lo van a lograr.
Sueño con ascender con este equipo y hacer lo mejor posible. No soy necio, hay elecciones y después veremos la comisión directiva que esté si quiere contar conmigo. Estoy pensando en Almirante, el Reducido sigue cerca.
Hay mala leche, escuché algunos que dijeron que era tiempo que me vaya a Chacarita, pero si Vivaldo se va de Temperley, es para irse a la casa. Luego si hay ofertas las analizaré pero no voy a abandonar el barco ahora.
“Caímos en un pozo, cometimos fallas muy grandes”; “En la nota del Diario Olé hay cosas sacadas de contexto. A mi me dio vergüenza perder 4-1, pero el responsable soy yo”; “Quieren quebrar mi relación con la gente de Temperley y no lo van a lograr”; “Hay mala leche, escuché algunos que dijeron que era tiempo que me vaya a Chacarita”.
-¿Por donde se explica la merma en el rendimiento hasta llegar al 1-4?
-Fue raro realmente. Tuvimos chances para extender la ventaja estando 1-0 y después hacemos un foul evitable cerca del área y desgraciadamente Krikorian mete el gol en contra. Caímos en un pozo, cometimos fallas muy grandes, en todas las líneas. Era una final y hasta empatando manteníamos el lugar en la tabla por eso nos da mucha bronca.
-¿Le falta capacidad para resolver en el momento al equipo?
-No creo que sea así. Nosotros no planteamos los encuentros dependiendo del rival sino que tenemos una identidad. Además, no hay mucha diferencia entre ellos y nosotros. En el fútbol para que te sorprendan hay que ser muy dormido.
-¿Cuánto dolieron las ausencias?
-Mucho. Primero porque fueron varios y después por la experiencia que le podrían impregnar. La mayoría de los que faltaron son titulares. Igual nada justifica la cantidad de errores que se cometieron.
-¿Qué analizas de tus declaraciones post-partido?
-En la nota del Diario Olé por ejemplo hay cosas sacadas de contexto. A mi me dio vergüenza perder 4-1, pero el responsable soy yo. Por eso quería llegar a mi casa y meterme en un pozo porque tras ganar tres partidos uno sueña con llegar a más.
Te sacan en la Tapa de Ole diciendo que “Vivaldo se avergüenza de Temperley”. No es así, el tema es como jugamos.
Hay jugadores que cuando tienen la oportunidad no la aprovechan, por rendimiento se ponen y se sacan solos. Vende más el conflicto y yo soy muy frontal.
-¿Esto de se frontal te jugó en contra alguna vez?
-En Temperley me pasa algo especial porque el trato que tengo con los muchachos no lo voy a tener mas adelante en otros clubes. Al haberlos tenido a la gran mayoría como compañeros, podemos hablar de todo y ser frontales porque yo voy siempre con la verdad, aunque a veces duela.
Todos nos equivocamos y por eso tenemos que tratar de corregir para crecer. A la larga, los futbolistas lo valoran, porque no me gusta dejar pasar cosas por alto.
-¿Estás esperando por los lesionados para armar el equipo?
-Pagés ya está para jugar. Mas Farina y el “Tati” que quizás vaya al banco porque no está 100%. Quiñónez tiene un desgarro y no llega, más Brito y Villalba que van evolucionando aunque creo que el primero llega, el segundo no.
-¿Te llamaron de Chacarita?
-Lo juro por mis hijos que ningún dirigente de Chacarita me llamó. Aquel que me conoce en la intimidad sabe que no me hubiese expuesto a ese juego. A mi me habían tentado antes, cuando arribó Zielinzky pero ahora no. Quieren quebrar mi relación con la gente de Temperley y no lo van a lograr.
Sueño con ascender con este equipo y hacer lo mejor posible. No soy necio, hay elecciones y después veremos la comisión directiva que esté si quiere contar conmigo. Estoy pensando en Almirante, el Reducido sigue cerca.
Hay mala leche, escuché algunos que dijeron que era tiempo que me vaya a Chacarita, pero si Vivaldo se va de Temperley, es para irse a la casa. Luego si hay ofertas las analizaré pero no voy a abandonar el barco ahora.
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